Para Alvin Tofler, la comunicaciòn, o lo que queremos transmitir, surge de las imágenes que los seres humanos, tenemos dentro y estas imágenes se generan a partir de la informaciòn que contiene su cerebro, es decir, que el origen de la comunicaciòn serìa la informaciòn que cada uno tenga.
Entendiendo que cada persona "carga" una cantidad, variada, diferenciada y sesgada de informaciòn la capacidad para coincidir se diluye en extremos hasta en nivel de hacerse imposible o dificultosa. Vemos a diarios las posturas y perspectivas que generan conflicto y notamos como cada uno de los elementos que participan, poseen, desde la informaciòn diferente, a la actitud desigual y el comportamiento que no coincide.
Los padres y los hijos, la relaciòn entre las parejas, la problemàtica generada en el trabajo, entre jefes superiores y subordinados, la complejidad en las ideologìas o simplemente la forma acadèmica de adquirir conocimientos, mantienen de manera intrìnseca esta ecuaciòn : informaciòn- comunicaciòn.
De mediar que no exista una informaciòn uniforme, la incapacidad para manejar la comunicaciòn sobrevendrà y tal vez esta nunca se realice.